Utilizadas para bombear líquidos claros o de baja viscosidad en general.
El fluido entra por el centro del rodete y sus álabes lo impulsan hacia el exterior por efecto de la fuerza centrífuga.
Son bombas que deben trabajar siempre en carga o mediante válvula de pie si se sitúan por encima del nivel del líquido.
– BOMBAS CENTRÍFUGAS MAGNÉTICAS:
Especialmente diseñadas para el bombeo de productos corrosivos donde la seguridad sea incuestionable, gracias al acoplamiento magnético que impide la fuga del producto.
Este tipo de bomba dispone de dos gamas: Plásticas (Polipropileno, PVDF) y Metálicas (Acero Inoxidable).
Caudales hasta 200 m³ / hora.
Disponibilidad de versión autoaspirante.
– BOMBAS CENTRÍFUGAS DE CIERRE MECÁNICO:
Las bombas centrífugas de cierre mecánico están especialmente diseñadas para el bombeo de productos químicos, ácidos, etc, donde la seguridad mediambiental sea incuestionable, gracias al acoplamiento entre el motor y la bomba. Presiones hasta 10 Bar. Bombas con disponibilidad de doble cierre mecánico. Versión de bomba autoaspirante.